Nada ocurre, nada cambia
Solo es el tiempo que pasa
Los lienzos desdibujados
En la esperanza se bañan.
La chica rara camina
Vagabundea en la plaza
Entre opulencias y harapos
De huidas crisálidas.
Ni sus pretendientes palian
Esa hambre desaforada
De saborear la excitación
De una ciudad adorada.
Una belleza mística
Que sangre y lágrimas lavan
Un querer contarlo todo
Concluye diciendo NADA.
Luisa Jara
¡Bravo Luisa! Como Carmen, no eres solo espectadora.